Dramaturgia y dirección: Gustavo del Río
Daniel, escritor gallego emigrado a Madrid, vuelve a la tierra después de la muerte de su padre, con quien no mantenía una relación fluida. En el camino se encuentra con Rosa, que coge el mismo tren que Daniel con destino A Coruña. En este viaje a Galicia se encuentra con su pasado y con la necesidad de buscar sus raíces. Un viaje a su origen.
Este largo viaje dará pie a que ambos personajes -el gallego en Madrid que reniega de Galicia y la gallega en Galicia que reniega de Madrid- conversen largo y tendido. De esta manera Daniel se nutrirá del punto de vista de su compañera para poner en orden unas ideas que se agolpan en su mente cuando ha de enfrentar el reencuentro con sus raíces. En las 6 horas que dura el viaje, Daniel y Rosa empezarán por confrontar la vida en la capital con la vida en provincias; al mismo tiempo que Daniel revive toda una serie de fantasmas. Un trayecto, casi más mental que geográfico, que pondrá a Daniel contra las cuerdas, hará que se formule preguntas y que busque respuestas para asumir sus errores y vivir en paz con ellos.
Castrapo habla de lo que fuimos y ya no somos y de lo que somos y ya no seremos.